Un nuevo proyecto de ordenanza que propone la realización de exámenes de rinoscopía para el intendente, concejales y funcionarios desató un intenso debate en la comunidad de Metán. El concejal Federico Delgado, autor de la iniciativa, defendió su propuesta en una reciente entrevista, argumentando que busca combatir la drogadicción y proporcionar un mensaje claro sobre la postura de la política frente al narcotráfico.
Enfatizó que la ordenanza responde a una necesidad de transparencia y responsabilidad dentro de la administración pública. “Este proyecto tiene autonomía, una autoridad intelectual honesta. No busco polemizar, sino dar una imagen clara a la sociedad sobre que la política no va a convivir con el narcotráfico”, afirmó. Según el concejal, la exigencia de exámenes toxicológicos ya es una práctica común en otros ámbitos, como en las industrias mineras, donde es obligatorio demostrar que no se consumen estupefacientes antes de ser contratado.
El intendente José María Issa el jefe de Gabinete Mauricio Abregú, como así también el concejal Mario Díaz, también mostraron su apoyo a la propuesta, señalando que es un paso necesario en la lucha contra el narcotráfico. Este respaldo se alinea con las inquietudes de muchos ciudadanos que han expresado la necesidad de establecer controles más estrictos en el ámbito político. “Esto es lo que la gente me ha pedido”, aseguró Delgado, quien se comprometió a ser un portavoz de esas demandas.
Sin embargo, el concejal no escatimó críticas hacia sus colegas, especialmente hacia los diputados Sebastián Otero y Gustavo Dantur, subrayando que su falta de conocimiento sobre la realidad de Metán limita su capacidad para entender el alcance del problema de las drogas en la comunidad. “Capaz que no viven acá o, andan poco por Metán por eso no saben lo que se está vendiendo ni cómo se está consumiendo. La gente sufre, y lo que necesitamos son respuestas concretas, no discursos vacíos”, dijo Delgado.
La propuesta fue sometida a discusión en el Concejo Deliberante, donde se presentaron varias mociones. Mientras Delgado aboga por que el proyecto sea enviado a la comisión de salud, otros concejales, como Federico Anuch, solicitaron su archivo. “Respeto todas las mociones, cada uno tiene su punto de vista, pero estoy trabajando para imponer lo que pide la sociedad”, explicó Delgado, quien se mostró dispuesto a aceptar modificaciones sugeridas por sus colegas.
Durante su ela entrevista, el concejal destacó la gravedad del problema de las drogas en Metán, citando que muchos jóvenes de apenas ocho años ya están expuestos al consumo de estupefacientes. “Si seguimos así, el narcotráfico se encargará de construir hospitales y barrios, regalando pelotas de fútbol y convirtiéndose en los dueños de la comunidad. Eso es lo que debemos evitar”, advirtió al tiempo que expresó su preocupación por la falta de control sobre la situación.
Delgado también rechazó las críticas de quienes lo acusan de buscar un espectáculo político. “No estoy buscando polémicas. Mi compromiso con la lucha contra las drogas es real y tengo la responsabilidad de presentar herramientas legislativas que ayuden a enfrentar este problema”, aseveró. Afirmó que las leyes no son retroactivas y que es fundamental establecer reglas claras para quienes aspiren a ocupar cargos públicos en el futuro.
El concejal subrayó que su objetivo es crear un marco legal que garantice la salud mental de quienes trabajan en la administración pública y, a su vez, prevenir situaciones de riesgo. “No puedo obligar a nadie a hacerse un examen, pero sí puedo garantizar que aquellos que decidan postularse cumplan con ciertos requisitos de salud”, añadió. Delgado resaltó que se necesita un compromiso serio para erradicar el consumo de drogas en todos los niveles.
A pesar de la resistencia de algunos sectores políticos, Delgado se mostró decidido a seguir adelante con la iniciativa. “La política no puede divorciarse de la gente. Hay que consensuar con la sociedad, que es la que está sufriendo las consecuencias del narcotráfico”, concluyó.
El debate sobre este proyecto de ordenanza sigue en pie, y su futuro dependerá de la discusión en el Concejo Deliberante y de la voluntad de los concejales de enfrentar una problemática que preocupa a la comunidad de Metán.