Cada 19 de abril varios países del mundo celebran el día de San Expedito, en honor al patrono de las causas justas y urgentes. En Argentina, la Parroquia Nuestra Señora de Balvanera todos los años recibe miles de personas para realizar su ofrenda a este santo venerado en la Iglesia Católica.

Tal como indica su nombre, muchas personas recurren a él en momentos de necesidad o emergencia, buscando su intercesión ante Dios para obtener ayuda rápida en sus problemas. Su devoción se ha extendido a diferentes partes del mundo, especialmente en países de tradición católica, donde se realizan celebraciones y se le ofrecen oraciones y peticiones en su honor.

Su historia y origen son objeto de debate y leyendas. Se cree que fue un mártir cristiano que vivió en el Siglo III en Melitene, una antigua ciudad de Armenia. De acuerdo a la historia conocida, este comandante del ejército romano se convirtió al cristianismo y decidió predicar su fe a toda su tropa. Además, buscó defender a todos los cristianos que eran enviados a los circos a luchar contra leones y ser devorados.

Por su fe y su accionar, fue martirizado durante la persecución del Emperador Diocleciano en el año 303 d.C, un 19 de abril.

El 19 de abril de 1940 se organizó en Pátzcuaro, Michoacán, México, el Primer Congreso Indigenista Interamericano. Fue un acontecimiento que reunió a representantes de distintos países y comunidades indígenas de América con el objetivo de compartir y actualizarse sobre las realidades que estas comunidades experimentaban o sufrían en sus territorios y culturas.

El resultado más destacable de este Primer Congreso fue la creación del Instituto Indigenista Interamericano (III), al cual se le asignó como principal meta organizar y armonizar las políticas indigenistas de los Estados Miembros y promover los trabajos de investigación dedicados al desarrollo de las comunidades indígenas.

Algunos de los tópicos en que se reúnen la variedad de acuerdos y recomendaciones que se hicieron en este congreso son la formación de escuelas rurales, la protección de la mujer indígena, el cuidado del suelo, el respeto por la posesión de tierras y el diseño de políticas agrarias que consideren a la población indígena no agrícola.

El 19 de abril se ha instituido como Día del Aborigen Americano en conmemoración a este Primer Congreso Indigenista Interamericano. Es una fecha que reivindica el reconocimiento a las comunidades aborígenes en su condición de preexistentes, respetando y promoviendo su derecho a una educación intercultural, a su personería jurídica y al cuidado de las tierras que estas comunidades habitan.